Gais Contra el VIH demanda al Ministerio de Sanidad y a las Comunidades Autónomas el acceso urgente a la PrEP

Según datos del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, en 2015 en España se produjeron un total de 3428 casos de infección por VIH (datos sin corregir por retraso en la notificación) de los que los hombres suponen el 85.9% de los nuevos diagnósticos, siendo la transmisión en hombres que tienen sexo con hombres (HSH) la más frecuente con un 53.6%. Una enfermedad que parecía controlada pero que vuelve a dar la cara en generaciones más jóvenes ya que el 50% de los nuevos contagios se da en menores de 25 años y unas 135.000 personas viven en España con el virus.

Estas son algunas de las llamadas de atención que ayer se hacían en Sevilla en el marco del XVIII Congreso Nacional sobre el Sida e ITS, Seisida 2017. Las 10 organizaciones que integran la plataforma destacaban la pasividad de las administraciones públicas frente a la implementación de esta eficaz estrategia preventiva tras demostrarse que la combinación Tenofovir+Emtricitabina (que se comercializa con el nombre de Truvada) su eficacia para prevenir la infección por VIH, en ensayos clínicos como el iPreX, PROUD  e Ipergay, o lo que es lo mismo tratamiento de preexposición, PrEP. De hecho, la Comisión Europea autorizó su comercialización en agosto de 2016. Pero, a día de hoy, esta estrategia preventiva sigue sin estar disponible en España.

Durante el congreso se constató que frente a un estancamiento, o bajada, en las transmisiones de usuarios de drogas y relaciones heterosexuales, el colectivo de HSH y mujeres transexuales, acapara más de la mitad de las nuevas infecciones, pasando de un 47,5% en 2009 al 56% en 2015, datos que evidencian que el VIH es una epidemia dentro de este grupo de población. A pesar de ello, las estrategias de prevención implementadas desde las autoridades sanitarias se limitan a modificar las conductas sexuales, dejando que aspectos de índole moral impidan implementar medidas efectivas contra la expansión del VIH.

“Es urgente añadir la PrEP al paquete de medidas preventivas que se deben ofertar a las personas más en riesgo de adquirir la infección si queremos alcanzar los objetivos de ONUSIDA en España para el 2020 y dejar de ser uno de los países de la Unión Europea con las más altas tasas de VIH”, aseguró Diego García, presidente de Adhara, una organización sevillana miembro de la Plataforma que realizan un trabajo comunitario con gran efectividad a la hora de detectar las infecciones de VIH en Sevilla y Andalucía Oriental.

De hecho, en aquellos lugares donde la PrEP se ha incorporado dentro del paquete de medidas preventivas las nuevas transmisiones han bajado de manera considerable, como es el caso de EEUU, Canadá, Australia, Noruega y en países de recursos limitados donde el genérico ya está disponible.

Desde la Comunidad se ha exigido a Gilead, propietario del fármaco, que facilite el acceso bajando su precio, pero hasta ahora no se dispone de información de cómo se están desarrollando las conversaciones entre el laboratorio y el Ministerio para la fijación del precio en España y si se va a incluir dentro de la cartera de servicios del SNS. Mientras tanto las nuevas infecciones se siguen sucediendo.

“Consideramos inaceptable esta situación. La patente de Truvada expira en España el próximo verano y a pesar de los intentos de Gilead para mantener la patente unos años más, la comunidad exige que el fármaco sea accesible. Ya sea con un acuerdo con el propietario de la marca o accediendo al fármaco en formulación genérica”.

Además, la Plataforma denuncia la precariedad en la que se encuentra el Plan Andaluz frente al VIH, sida y otras ITS. “La escasez de presupuesto y de una verdadera voluntad política en frenar la epidemia en Andalucía”, afirman.

En la actualidad sigue sin conocerse la evaluación del anterior plan andaluz frente al VIH 2010-2015 y no se ha convocado a la sociedad civil para elaborar un nuevo plan. “La línea de subvenciones para la prevención de la infección continúa estancada desde hace años y se muestra absolutamente insuficiente para dar una respuesta efectiva. A esto se añade la escasez de material preventivo como son las pruebas de detección rápida”, denuncian.

Ponemos como ejemplo a Juan Ramón Barrios, presidente de la coordinadora estatal de CESIDA. Se infectó de VIH con 17 años cuando el virus era mortal y se considera un superviviente: “La realidad del VIH era la muerte segura, largas estancias en los hospitales y desarrollar la enfermedad”, explica, “veíamos que, aparte del miedo personal, como amigos y familiares morían sin remedio alguno”.

La aparición en 1996 de tratamientos de alta eficacia devolvió la esperanza de vida a muchas personas con sida: “Ya no es una muerte anunciada como antes pero en CESIDA creemos que ha hecho que se relajen en los últimos años las medidas preventivas con un repunte de jóvenes que contraen la enfermedad en los niveles de los años 80”, advierte Barrios.

El activista señala que el virus es la puerta de entrada a otras enfermedades: “tuberculosis, neumonía, herpes… hay un montón de enfermedades asociadas al VIH y son indicadores de que esa persona puede ser portadora. El problema es que un gran número de personas ignora que lo tiene y contagian a sus parejas sexuales. Cuando empiezan a tratarse la enfermedad está ya muy avanzada, por eso es importante es prevenir y hacerse la prueba rápida”, aconseja Barrios.

Solo en Andalucía cada día 2 personas se infectan de VIH y uno de cada 3 infectados tiene menos de 25 años y aunque conoce los peligros del contagio solo un 15% utiliza preservativo. Son datos escalofriantes a tener muy en cuenta.