Una mujer gana la subasta para “golpear” al hombre que incrementó al 5000 % un tratamiento contra el VIH

El año pasado la BBC lanzaba una pregunta: ¿Es Martin Shkreli el hombre más odiado de los EE.UU.?. Posiblemente sí. Cuando era CEO de Turing Pharmaceutical elevó el precio de un medicamento llamado Daraprim que los pacientes de VIH necesitan para sobrevivir, de 12 a 670 euros, se ganó a pulso el desprecio popular. No sólo elevó al 5.000% el coste del medicamento sino que después ironizó asegurando que le gustaría haberlo elevado aún más y aplaudió la decisión de la compañía Mylan de subir el precio de las dosis de epinefrina conocidas como EpiPen (usada para tratar una serie de afecciones incluyendo: paro cardiorrespiratorio, anafilaxia, sangrado superficial, broncoespasmos e hipoglucemia). Pero Shkreli le ha dado la oportunidad a una mujer de liberar tensiones y hacer lo que miles de personas estarían encantados de hacer: cruzarle la cara a Shkreli.

Tal vez con el objetivo de librarse de su mala conciencia y siendo consciente de los odios que despierta, Shkreli, un día después de la muerte de su amigo y encargado de relaciones públicas, Mike Kulich con tan sólo 29 años, anunció en Twitter que permitirá a alguien golpearlo en el rostro si esa persona es la que dona más dinero para Tyler Kulich, el hijo de cinco años de Mike que lucha contra la leucemia linfocítica aguda y que cuenta con una página para recaudar fondos.

https://twitter.com/MartinShkreli/status/780948194326970368

Y ya tenemos ganadora. El propio Shkreli ha anunciado que la persona es de Florida y se llama Katie. La citada señora que marcará con sus dedos la cara del “hombre más odiado” pagará la cantidad de 50.000 dólares a la familia Kulich y se dará el gustazo de hacer algo que miles de personas les hubiera encantado hacer para descargar adrenalina.

Eso sí, el infame Shkreli lo ha dejado bien claro no vaya a ser que la señora se emocione: “No se permitirá a Katie que me golpee repetidamente en la cara conforme a lo solicitado”, escribió en Twitter.

La subida de los precios del tratamiento contra el VIH el año pasado provocó una gran indignación pero Shkreli se negó a dar marcha atrás. Renunció a ser CEO de la  compañía que fundó después de que fue detenido acusado de fraude. Shkreli causó más indignación a principios de este año después de que se presentó ante el Congreso de Estados Unidos para responder a las preguntas acerca de las acciones de su compañía pero siguió en el consejo su asesor legal que permaneció en silencio sobre el incidente.

El ex director general parecía divertirse de lo lindo durante la audiencia sonriendo a muchas de las preguntas a las que se negó a contestar e incluso esbozando una enorme sonrisa cuando le dijeron el impacto de sus acciones de avaricia había provocado sobre la salud de las personas. “Esta es una sociedad capitalista, el sistema es capitalista y tenemos reglas capitalistas”, sentenció el odiado personaje.

Si fuera Katie iría ensañando con la mano abierta para que Shkreli nunca olvide la lección: La avaricia rompe el saco y no por hacer una buena acción eres mejor persona.  Por si acaso, seguiría el consejo que el propio Shkreli sugirió en redes sociales: “Si no estás seguro de que puedes lanzar un buen golpe, puedes elegir a alguien que lo haga por ti. Por ejemplo, Mike Tyson”.